miércoles, 4 de junio de 2014

Jugando a...MIL (II)

Nueva reunión semanal con las señoras mayores.
Como siempre, aunque en un principio íbamos a jugar a otro juego, pero como ya están todas achacosas, muchas faltaron, entre ellas la que lo iba a traer, así que me fui corriendo a mi casa a por el "MIL" y junto a dos de los colegas, montar una partida.







Era la segunda sección para uno de los jugadores y para mi, pero como el otro compañero no conocía el juego, me tocó volver a repetir todas las reglas del juego y perdimos cerca de una hora junto con el montaje.

Aunque volvimos a hacer mal alguna que otra cosa (un caballero vasallo mio me atacó), la verdad es que la cosa fue mucho más fluida, al haber dos jugadores que teníamos las cosas mucho mas clara.




Yo opté por dos primeros turnos para recolectar, ampliar territorios libres y sobre todo comprar muchos soldados.
En el tercero, ya comenzaron las tortas.
Ataqué al jugador azul, que en aquel momento andaba el primero, por su estrategia de casar a todas sus mujeres con cualquier varón posible.
Eso hizo que tuviera muchos puntos prestigios ganados de fácil, pero le dejó sin mujeres solteras, y pegarle no costaba influencia.
Cuando él quiso devolverme el ataque, mis 4 solteronas comenzaron a criticarles en la corte y no le quedó otra opción que desistir atacarme.


En el cuarto turno, hice un vasallaje dando una tierra a un caballero B, lo que me dio 8 puntazos.

Y cuando entrabamos ya en el ultimo turno, yo tenía almacenados 3 fichas de oros, y siendo el jugador inicial, la cosa estaba clara, desde un principio moverme a la esfera de corte para lograr dos nuevos vallasajes de 8, quedamos además sin tierras para evitar ser atacado.
Confié en que esa táctica iba a ser la ganadora, pero por desgracia, una de las señoras mayores tuvo que irse, y no nos quedó más remedio que no poder acabar el ultimo turno.



Cuando comenzamos a recoger y vi los pocos recursos de mis rivales, y entre ellos apenas oros, comprendí que la partida estaba ganada.

La verdad es que el juego, aunque es sencillo de aprender a jugarlo, creo que es difícíl de dominarlo, ya que hay muchas variantes.
Pienso que la cosa es tener muy claro desde el principio el camino que vas a tomar en la partida, e intentar no alejarte mucho de él.

Un gran juego que a ver si logro seguir sacándolo más a la mesa.







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