jueves, 22 de noviembre de 2018

Noble arte de darle la partida a otro...





Hay juegos que, pese a tener ideas o mecánicas buenas, esconden una trampa, que no es otra que la propia esencia del juego permita a un jugador regalar la partida a otro, en detrimento de los demás.
¿Pero alguien es capaz de hacer eso en conciencia?
Hombre, generalmente, suele ser por una mala concepción del momento de puntaje de la partida, aunque supongo que uno, cuando tiene en su mano la llave de hacer que uno u otro gane, aunque después lo disfrace con otras razones, alguno habrá que lo haga a conciencia para joder al que le cae peor.

Pero desde hace tiempo en mi grupo de juegos, existe un jugador que se dedica, durante toda la partida en juegos de este tipo, a llorar sin remedio, intentando oculta la situación real de la partida, y lo peor, es que generalmente, le funciona.
Más allá de esto, lo más molesto es estar durante horas pensando durante la partida para ganar, para comprobar al final que no importa lo que hagas, porque pese a todos los avisos, el mismo jugador de siempre le volverá a regalar la partida, y esto hace que no me apetezca jugar a estos tipos de juegos, o que los juegues sin mucho interés ni meditación.
Cada vez, en conclusión, adoro más los juegos donde uno no puede influir demasiado en el rival, ya que en esos juegos es donde puedes jugar sabiendo que el resultado de la partida, quitando azar, estará condicionada por lo que cada uno haga en ella, no lo que le regalen.

1 comentario:

Masama dijo...

Divagaciones de una Señora Mayor.....juega mejor y diviértete!!
...aunque algo tienes de razón en lo que dices....ayer me dí cuenta de lo que llora Maese....jajajajajaja